sábado, 13 de junio de 2009

No creo



No puedo creer en las palabras, el tiempo me ha enseñado a ser cautelosa y

solo escuchar lo que debo escuchar.

No puedo creer en las promesas, la vida me ha enseñado que estas se las lleva

el viento como un huracán.

Y las ilusiones se desvanecen en el camino, cuando has creído y sentido los

sentimientos del amor tan cerca y hasta lo has olido.

Y llega el desencanto, la desilusión, mil sentimientos acumulados y te das cuenta

que todo lo compartido y entregado no ha sido lo suficiente

para hacer feliz en quien confias, en quien colocas tantas esperanzas y

sientes en el alma.